ADUNC comparte el dolor y se suma al duelo de las familias de los fallecidos en la Estación de Once.
Compartimos también el duelo y la conmoción popular frente a este hecho trágico. Denunciamos esta masacre como consecuente de la continuidad de las políticas privatizadoras que abona el Gobierno Nacional, que abandonan el Transporte Público en manos de empresas tercerizadas que embolsan subsidios sin poner un solo peso para el mantenimiento y la renovación de las formaciones, como ha sido denunciado reiteradamente por los trabajadores de la línea Sarmiento.
Hace algunos años Juan Carlos Cena, jubilado ferroviario y estudioso del tema previno, que de seguir este estado de cosas era previsible un Cromagnon en los trenes. Lamentablemente esto se produjo el pasado miércoles.
Compartimos el reclamo para que se esclarezcan los hechos y se juzgue a los responsables de todas estas muertes, en tanto no aceptamos que tan trágico hecho sea caratulado como “accidente”, según declaró J.Pablo Schiavi (Sec. de Transporte).
También será necesario un debate a fondo sobre las consecuencias que ha tenido la política privatizadora y la necesidad de re-estatizar el servicio ferroviario.
Reiteramos nuestra solidaridad para con las familias afectadas. Exigimos Justicia por los 50 trabajadores fallecidos, y más de 600 heridos.
Expresamos nuestro enérgico repudio a las políticas privatizadoras que impone el Gobierno Nacional, como continuidad de las políticas menemistas. El transporte público no puede seguir siendo un negocio. Humanizar el servicio significa que sean sus trabajadores y los usuarios los que definan una política y realicen su efectivo control.
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